Vita

Vita, el Valle de los Murales, es un pequeño centro de vocación prevalentemente agrícola, en el que se producen óptimos vinos y aceite. La ciudad, fundada enlos primeros aós del Seiscientos por el Barón Vito Sicomo, del que tomó el nombre, presenta vastos campos cultivados. Sobre la cima del Monte Baronía destaca el bosque homónimo, amplio espacio verde de relevante interés naturalista. Aquí es posible efectuar agradables excursiones, disfrutando de momentos relajantes, de un aire salobre y de espléndidos panoramas de la campiña circunstante. Vita es también famosa por sus tradiciones: por San José se montan altares votivos decorados con panes simbólicos; en el día de la Ascensión, con una fiesta muy sentida por la población, se celebra la Virgen de Tagliavía: de los carros engalanados que desfilan por las calles de la ciudad enuna atmósfera mágica y sugestiva, se lanzan productos locales como vino, aceitunas y cucciddati, característicos panes con forma redonda.
HISTORIA
La ciudad surge por deseo del barón Vito Sicomo que en 1607 obtuvo del rey Felipe III de Aragón el ius populandi y del fundador tomó su nombre. En 1848 los habitantes participaron en los motines revolucionarios y en 1860 proporcionaron un válido soporte logístico al ejército garibaldino a cuyo lado estuvo, en la Batalla de Pianto Romano, una escuadra de “picciotti” (chavales) de Vita. Garibaldi estuvo aquí y desde este lugar, el 15 de mayo, se dirigió con los suyos hacia el Monte Pietralunga para hacer frente a las tropas borbónicas. En la historia más reciente, ha sido relevante el flujo migratorio, a comienzos del siglo XX, de muchos viteses hacia el norte de Italia y al extranjero, sobre todo a Canadá, donde en Toronto vive una comunidad. El terremoto de 1968 ha cambiado completamente el pueblo, tanto por los daños provocados como por los cambios sociales, culturales y edilicios. Vita ha perdido sus obras más significativas: la Iglesia Madre y el Palacio Baronal. La reconstrucción se ha llevado a cabo en un área contigua al viejo centro urbano en contrada Giudea.
PAISAJE
Extraordinarios testimonios residuos de un antiguo bosque de Quercus virgiliana con su cortejo floral, presentes a lo largo de la carretera comarcal que conduce desde Calatafimi a Vita, reconducen a la historia de este paisaje de colinas en cuyos cultivos de olivo y los viñedos siguendulces curvas de nivel, que sube hacia el Bosque de la Baronía. Dejando descubrir el Monte Polizzo, la población de Vita y Montaña Grande, propiedad del Estado. El Bosque de la Baronía domina el contexto. Bien conservado y equipado ofrece espacios para pic-nic; trazas de antiguas neveras, excepional testimonio del insólito y antiguo comercio del hielo; maravillosas vistas panorámicas de la provincia de Trápani y Palermo. Alucinante es además la vista del templo de Segesta, el Obelisco de Pianto Romano y el Castillo de Salemi.
NATURALEZA
La reaparición de Melojos y Quejigos, especie de pequeñas encinas típicas del área mediterránea, reconducen al bosque que originalmente cubría la cima del Monte Baronía. El actual bosque bajo la dirección de la Empresa Forestal, actualmente tiene una extensión de casi 67 hectáreas y alcanza una altitud de aproximadamente 100 hectáreas sobre el nivel del mar con un área equipada con 4 fogones y 60 asientos. En su interior, predominantemente destinado a coníferas pertenecientes a los géneros Pinus, Cedrus, Cupressus, entre las que están presentes también falsas acacias caracterizadas por su rápido crecimiento, sobreviven franjas de bosque de melojo, con su relativo cortejo floral, tanto que, en los bordes de la carretera comarcal que de Calatafimi conduce a Vita, se pueden admirar imponentes ejemplares de Quercus virgiliana (encina castañera). Además de la encina, en estas formaciones se encuentran también el escaramujo, Crataegus monogyna, Daphne laureola, Prunus spinosa, Rubus ulmifolius, Calicotome infesta, Asparagus acutifolius, Ruscus aculeatus, Cytisus villosus, Lonicera etrusca, Erica arborea, componentes del estrato arbustivo. Entre las ramas es posible observar al arrendajo, pequeño córvido con el cuerpo rosado y el lomo blanco, con la cola larga y negra y las alas blancas y azules, con un temperamento esquivo, pero que revela su presencia a través de su voz ronca. Allí donde las condiciones del suelo se hacen más ásperas se hallan formaciones vegetales constituidas por esencias aromáticas de hojas mediante cuyo abultamiento carnoso en su base se articulan con el tallo, como el tomillo, la ajedrea, el orégano, el hinojo salvaje, que consiguen vegetar sobre estratos rocosos a veces privados de suelo. Las formaciones de garriga son, en general, de origen secundario, debidas a la degradación forestal original. Así sucede en torno al laguillo derivado de una niviera (nevera), donde en otro tiempo se amontonaban grandes cantidades de nieve invernal protegiéndola con paja y tierra de manera que pudiese utilizarse como hielo en verano.
TRADICIONES
Puntualmente, cada año, en el día de la Ascensión, Vita celebra solemnemente la Fiesta de la Virgen de Tagliavía, con sugestivos actos religiosos como la Misa de Medianoche, la Bendición Matutina de los Animales, los Peregrinajes y la Procesión, a los que se asocian las manifestaciones más genuinas del folclore siciliano, como el característico desfile que se lleva a cabo por la tarde. Es la Fiesta de la Abundancia pero también el modo de expresar agradecimiento a la Virgen de Tagliavía por la cosecha agrícola, no sin finalidades propiciatorias. Abre el desfile el grupo folklórico “Sicilia Bedda” entreteniendo a la multitud con sonidos y danzas folklóricas; sigue el tambor y detrás de éste tres bandas a caballo abren la Cabalgata, compuesta por aproximadamente cuarenta caballeros a la grupa de mulos o caballos, que representan las cofradías de las que llevan los símbolos: burgueses, capataces, carreteros, diputados de la fiesta, viticultores. Avanzan con orden y algunos lanzan confetti. Los “borgesi” llevan el Circu o Prisenti, una composición formada por cucciddati (pequeños panes en una corona), flores y espigas en lo alto. La Cabalgata va seguida por carritos sicilianos ricamente engalanados sobre los que los carreteros se exhiben con sus cantos tradicionales. Imponente y espectacular es el Carro del Vino y de las Aceitunas, formado por una original composición de doce semi-prensas, que aluden a la producción vitivinícola sobre la que se basa la economía vitesa, desde el que se lanzan botellitas con vino y aceitunas. Tras el Carro de los “burgesi”, precedida por la banda musical, cierra el cortejo la majestuosa y pintoresca Carroza del Pan, tirada por dos potentes bueyes; adornada con arrayán y laurel y vestida de claveles y cucciddati, lleva por los cuatro costados una vistosa “M”, símbolo de María. Desde el carro se lanzan a los balcones y a la multitud hacinada, quintales de panecillos (cerca de 40.000 piezas), tallados en zig-zag a lo largo del borde superior para representar el surco producido por el arado.
RELIGIÓN RECUERDO VÍNCULOS
La fiesta de la Virgen de Tagliavía, copatrona de Vita, se ha traspasado también a Canadá, a Toronto, por los numerosos emigrantes viteses que permanecen fuertemente ligados a su ciudad de origen. Estos, entre 1962 y 1964, han querido embellecer con frescos, a su cargo, la Iglesia de Vita en la que está conservada la pintura (1939) objeto de culto. A la devoción por la Virgen, que tiene su origen en el Santuario de Tagliavía, situado en la zona de Corleone, Vita asocia la que se tiene a San Francisco de Paula y a San José; con ocasión de la festividad de éste último, que cae el 19 de marzo, ciudadanos devotos montan altares adornados con simbólicos panes. De forma unificada se llevan a cabo los festejos en honor de San Vito, patrón de la ciudad, y del Santísimo Crucifijo, el primer domingo de septiembre, con celebraciones religiosas y manifestaciones folclóricas que se concluyen rigurosamente con los juegos pirotécnicos.
ARTE
Vita se llama también el “Valle de los Murales” ya que allí se han realizado numerosos murales que decoran y connotan calles y portales del viejo centro histórico. La finalidad de revitalizar los viejos portones y los muros de las casas ya deshabitadas se ha alcanzado admirablemente por pintores que se han cimentado presentando el tema “Oficios y Tradiciones de la Civilización Campesina” que se desarrolla a lo largo de un recorrido que atraviesa el centro histórico. Se han realizado también murales inspirados en la fiesta en honor de la Virgen de Tagliavía, del tema “La Fiesta”. En 2002, el Auditorium del centro Social ha albergado artistas de fama mundial que en el interior del local han representado “las Varias Expresiones del Arte”. Con ocasión del IV centenario de la fundación del Ayuntamiento de Vita, se han realizado dos grandiosos paneles. El primero es una síntesis socio-histórico-cultural de la comunidad de Vita. El segundo reproduce “la Batalla de Calatafimi” (estos últimos paneles se encuentran en el interior del palacio municipal).
MONUMENTOS
Todo el viejo centro urbano de Vita es un monumento, con sus características escalinatas enlosadas, en parte originales, y las típicas construcciones de piedra de yeso, utilizada predominantemente en las esquinas y en los portales de las casas. En otro tiempo existían en el territorio diversas caleras (hornos) donde la piedra se cocía y después se machacaba para ser utilizada en la construcción como aglutinante. Trazas de una calcara se encuentran aún en la carretera comarcal que conduce a Gibellina, a los pies del Bosque Baronía. Otros típicos elementos urbanos son las Fuentes Acquanova, y Ponte, realizadas con piedra calcárea. Una de las más antiguas, la Carpitoli, está ubicada en la carretera municipal Baronía. Al sisma de 1968 han resistido pocos Palacios Nobiliarios del siglo XIX, el Palacio Daidone y la Iglesia de la Virgen del Rosario o de la Virgen de Tagliavía, realizada en torno al 1930, además de las del Purgatorio y de San Francisco, lindante con el Palacio Municipal.
PRODUCCIONES TÍPICAS
Típica de la artesanía local es la manufactura de alfombras hechas con telares, productos que en Vita tienen una larguísima tradición, como la elaboración de las hojas de palma enana y la confección de cestos y paneras con varillas de olivo o de olmo y cañas. y que aún hoy constituyen un elemento precioso en todo ajuar. Discretamente desarrollados resultan los sectores de la construcción y de la carpintería. El sector industrial: una empresa con treinta años de experiencia especializada en la producción de material para la bioconstrucción, ofrece una gama completa de productos y soluciones tecnológicamente avanzadas para la colocación de baldosas y para la decoración, la restauración y la impermeabilización de las construcciones, con total respecto del ambiente, y está presente en el mundo trabajando directamente en España, Túnez, Libia, Malta, Canadá, Marruecos y Pakistán.
ENOGASTRONOMÍA
El cultivo de la vid es el principal recurso del territorio: a partir de las uvas blancas y negras, producidas en la zona de las colinas con avanzadas técnicas de elaboración, se obtienen preciados vinos, mientras que los tradicionales olivos proporcionan un aceite muy preciado que tiene como característica su bajísima gradación ácida. Es buena también la producción del trigo y los cereales, seguida por una variedad notable de frutos sabrosísimos. La miel representa otro anillo importante en la cadena de producción del Municipio y se caracteriza por la ausencia de sustancias añadidas. Plato típico son los “Tallarines con habas secas”. Algunas realidades artesanales mantienen la tradición, típicamente mediterránea, de conservar las primicias del huerto para utilizar durante todo el año como entremeses o guarnición. Además se practica el pastoreo con la relativa producción de quesos. Existen también granjas de bovinos para consumir su carne, de ovinos caprinos y de cerdos.
EVENTOS Y MANIFESTACIONES
La primera semana de agosto se lleva a cabo el Festival Internacional del Folclore “Ciudad de Vita”, una de las manifestaciones folclóricas más importantes de la Sicilia Occidental, que se propone hacer conocer las tradiciones populares de Sicilia y de otras regiones de países extranjeros, a través de la música y el espectáculo. Se organiza cada año por parte del mismo grupo folclórico Sicilia Bedda (la Bella) con el patrocinio del Ayuntamiento y prevé la participación, además de la del grupo anfitrión, de otros, tanto italianos como extranjeros, provenientes de países como Lituania, Perú, Serbia, Ucrania. Las exhibiciones alternan músicas de culturas y tradiciones diferentes, sorprendiendo a todos por la maestría y peculiaridad. Durante la manifestación se organiza la salsicciata, que da alegría y crea momentos de agregación entre los grupos, haciendo también degustar los productos típicos y conocer las tradiciones locales.
DIVERSIÓN DEPORTE Y TIEMPO LIBRE
Las instalaciones deportivas, desplazadas al nuevo centro urbano, proporcionan un satisfactorio servicio para practicar diversas disciplinas: comprenden un campo de fútbol, uno de futbito, dos de tenis y tres de bochas. Un especial relieve en el ámbito de las actividades socio-culturales, tiene el Centro Social, una grandiosa estructura que, con el Auditorium y la Sala Polivalente se utiliza para encuentros culturales, conferencias, proyecciones, espectáculos, muestras, asicomo veladas de entretenimiento. En el mismo centro están ubicadas la Biblioteca Municipal y la Multimedial y la sede de la Pro Loco Vitesa. La estructura funciona además como centro de asociación para los jóvenes y ancianos, a través de iniciativas de vario tipo y la demanda de intereses culturales y recreativos. El Parque situado delante de ella, dedicado a Vincenzo Renda, alcalde de Vita ininterrumpidamente desde 1944-46 a 1985, se presta además a diversas funciones al aire libre.